Opinión de un sector del empresariado sobre la reforma fiscal de Calderón
Disconformes, pequeños y medianos empresarios
Intocados, intereses de las grandes firmas en el proyecto del Ejecutivo
SUSANA GONZALEZ G.
La propuesta de reforma fiscal del Ejecutivo federal no toca para nada los intereses de las grandes compañías que operan en el país y tampoco hace efectiva la promesa presidencial de que paguen más impuestos quienes más tienen, aseveró Pedro Salcedo, dirigente de la Asociación Latinoamericana de Micros, Pequeños y Medianos Empresarios (Alampyme).
Al criticar la reacción de las cúpulas del sector privado sobre la iniciativa presentada el miércoles al Poder Legislativo, el dirigente aseveró que más que contribuyentes, las grandes compañías son "retenedoras" de los impuestos que generan sus trabajadores.
Consideró que la propuesta de reforma es "muy light y suave", pues ni siquiera se planteó modificar el llamado régimen de consolidación, mediante el cual se permite disminuir las cargas impositivas de los grandes corporativos, y a "los grandes empresarios se les va a seguir apoyando, como siempre, a pesar de que no generan tantos empleos" como los medianos y pequeños.
Añadió que los impuestos que pagan las grandes empresas, incluidas las trasnacionales, no corresponden a las ganancias que obtienen, porque cuentan con la facilidad y oportunidad de hacer importantes deducciones a partir de las pérdidas que registran en sus compañías más pequeñas, "creadas ex profeso por el mismo grupo, porque con esa legislación consolidan pérdidas y ganancias, y resulta que al final no pagan nada o muy poco del impuesto sobre la renta (ISR)".
En cuanto a las críticas que las cúpulas empresariales, como el Consejo Coordinador Empresarial, emitieron contra la propuesta, y la caída en la Bolsa Mexicana de Valores luego de que se conocieron detalles de la misma, Salcedo afirmó que "siempre tratarán de hacer mucho ruido y la intentona de no pagar nada, pero en realidad tienen metida la nariz en todo y determinan reformas y programas por conducto de sus representantes".
Así que, concluyó, aunque de entrada hagan "berrinche" porque consideran que la iniciativa afecta sus intereses, falta ver las decisiones que adopten los partidos políticos y los legisladores, algunos delos cuales toman como patrones a los grandes jerarcas del sector privado.